Unos días antes de la boda Alba y Jorge nos llamaron muy preocupados, por un momento pensamos que se cancelaba la boda, Jorge se había roto la pierna. ¿Pero quién dijo que una escayola les iba a impedir celebrar su boda? Después de pensarlo mucho, decidieron seguir adelante, y disfrutar de la boda que con tanto mimo habían preparado. Fue una boda realmente increíble, llena de momentos inigualables y, sobre todo, ¡llena de energía positiva! (y un taburete para el novio).